I. Pedro Figari en hipertexto

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arodriguez
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 1. EL ARTISTA Y EL PENSADOR. Pedro Figari (1861-1938), célebre en los dominios del arte, en su condición de gran figura de la pintura americana contemporánea, es asombrosamente desconocido, en su propio país, como pensador.((Recientemente se ha llamado la atención sobre su personalidad intelectual, bajo el ángulo de la filosofia estética: Ángel Rama, //La aventura intelectual de Pedro Figari// (Montevideo, 1951).)) Y sin embargo, entre los desaparecidos, nadie le iguala en significación filosófica. Carlos Reyles, por ejemplo -para citar un consagrado nombre coetáneo, con el cual tiene algunos nexos ideológicos, aunque también profundas divergencias- está lejos de representar, bajo este aspecto, lo que él. El pensamiento de Rodó es, desde luego, de mayor importancia histórico-cultural, por la identificación que tuvo con un momento de la conciencia espiritual del país y aún del continente; pero sin su estructura y su elaboración del punto de vista estricto de la filosofía. El caso de Figari, único en nuestra historia artística, lo es también en nuestra historia filosófica. 1. EL ARTISTA Y EL PENSADOR. Pedro Figari (1861-1938), célebre en los dominios del arte, en su condición de gran figura de la pintura americana contemporánea, es asombrosamente desconocido, en su propio país, como pensador.((Recientemente se ha llamado la atención sobre su personalidad intelectual, bajo el ángulo de la filosofia estética: Ángel Rama, //La aventura intelectual de Pedro Figari// (Montevideo, 1951).)) Y sin embargo, entre los desaparecidos, nadie le iguala en significación filosófica. Carlos Reyles, por ejemplo -para citar un consagrado nombre coetáneo, con el cual tiene algunos nexos ideológicos, aunque también profundas divergencias- está lejos de representar, bajo este aspecto, lo que él. El pensamiento de Rodó es, desde luego, de mayor importancia histórico-cultural, por la identificación que tuvo con un momento de la conciencia espiritual del país y aún del continente; pero sin su estructura y su elaboración del punto de vista estricto de la filosofía. El caso de Figari, único en nuestra historia artística, lo es también en nuestra historia filosófica.
  
-Tiempo antes de que, hacia los sesenta años de edad, diera comienzo a su insólita creación pictórica, había publicado en Montevideo su primer y más importante trabajo filosófico, obra +Tiempo antes de que, hacia los sesenta años de edad, diera comienzo a su insólita creación pictórica, había publicado en Montevideo su primer y más importante trabajo filosófico, obra también de madurez, como que lo produjo cumplida la cincuentena. Ese trabajo -un nutrido volumen de casi seiscientas páginas titulado //Arte, estética, ideal// (1912)- no tuvo repercusión en nuestro medio. Traducido al francés por Charles Lesca, se publicó bajo el mismo título en París, en 1920, con prólogo de Henri Delacroix. En 1926 fue reeditada la traducción francesa, esta vez con una extensa y entusiasta nota preliminar de Desiré Roustan sobre el arte y las doctrinas de Figari. El título primitivo pasó a ser subtítulo, reemplazado por el de //Essai de Philosophie Biologique//, más en armonía con el contenido del libro, verdadero ensayo de filosofía general, desde un punto de vista biológicoenergetista. Aunque el acento es puesto en la estética, comprende, además, una teoría del conocimiento, una metafísica, una filosofía de la religión, una antropología filosófica, una moral.
-también de madurez, como que lo produjo cumplida la cincuentena. Ese trabajo -un nutrido volumen de casi seiscientas páginas titulado //Arte, estética, ideal// (1912)- no tuvo repercusión +
-en nuestro medio. Traducido al francés por Charles Lesca, se publicó bajo el mismo título en París, en 1920, con prólogo de Henri Delacroix. En 1926 fue reeditada la traducción francesa, esta vez con una extensa y entusiasta nota preliminar de Desiré Roustan sobre el arte y las doctrinas de Figari. El título primitivo pasó a ser subtítulo, reemplazado por el de //Essai de Philosophie Biologique//, más en armonía con el contenido del libro, verdadero ensayo de filosofía general, desde un punto de vista biológicoenergetista. Aunque el acento es puesto en la estética, comprende, además, una teoría del conocimiento, una metafísica, una filosofía de la religión, una antropología filosófica, una moral.+
  
 //Abramos entonces// -dice Roustan, después de una referencia a los cuadros- e//l libro de Figari. Estaremos todavía asombrados: el índice nos promete toda una filosofía. El título nos hacía esperar reflexiones sobre el arte, la estética y el ideal, programa ya respetable. Pero observamos  capítulos sobre  la  evolución, la vida,  el  ins­ tinto,  la  conciencia,  la  religión, la  substancia, la  libertad, una  teoría de  la  ciencia,  una  crítica  del  cristianismo, ideas  sobre  el  tiempo, so­ bre  el  progreso,  sobre  la  inmortalidad, sobre  la  relación   del  hombre con  la  naturaleza.  Por  segunda vez  nos  preguntamos dónde  está  el centro  y  la  más  superficial lectura   nos  persuade   de  que  ese  centro existe, que estamos ante  un pensamiento sistemático, no ante una yuxtaposición   de   tesis   concebidas    independientemente  la   una   de la  otra//.((Pedro Figari, //Essai de Philosophie Biologique// (París, 1926), Introducción, p. VIII.)) //Abramos entonces// -dice Roustan, después de una referencia a los cuadros- e//l libro de Figari. Estaremos todavía asombrados: el índice nos promete toda una filosofía. El título nos hacía esperar reflexiones sobre el arte, la estética y el ideal, programa ya respetable. Pero observamos  capítulos sobre  la  evolución, la vida,  el  ins­ tinto,  la  conciencia,  la  religión, la  substancia, la  libertad, una  teoría de  la  ciencia,  una  crítica  del  cristianismo, ideas  sobre  el  tiempo, so­ bre  el  progreso,  sobre  la  inmortalidad, sobre  la  relación   del  hombre con  la  naturaleza.  Por  segunda vez  nos  preguntamos dónde  está  el centro  y  la  más  superficial lectura   nos  persuade   de  que  ese  centro existe, que estamos ante  un pensamiento sistemático, no ante una yuxtaposición   de   tesis   concebidas    independientemente  la   una   de la  otra//.((Pedro Figari, //Essai de Philosophie Biologique// (París, 1926), Introducción, p. VIII.))
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-2. SUBSTANCIA y ENERGÍA. Figari se formó en la Universidad de Montevideo en el período de apogeo del evolucionismo positivista, a fines del siglo. Pero luego derivó, más allá de Spencer, +2. SUBSTANCIA y ENERGÍA. Figari se formó en la Universidad de Montevideo en el período de apogeo del evolucionismo positivista, a fines del siglo. Pero luego derivó, más allá de [[figari:anexos:claps_-_spencer_y_comte_en_clinamen_03.pdf|Spencer]], hacia el materialismo cientificista, irreligioso y ateo, que presidían los [[http://es.wikipedia.org/wiki/Ernst_Haeckel|Haeckel]], [[http://www.pasteur.fr/infosci/archives/ldt0.html|Le Dantec]], Ostwald, si bien perfilándose bajo esta constelación filosófica, como un pensador de personalísimas aristas. Apoya o refuta a los nombrados, tanto como a filósofos clásicos
-hacia el materialismo cientificista, irreligioso y ateo, que presidían los [[http://es.wikipedia.org/wiki/Ernst_Haeckel|Haeckel]], [[http://www.pasteur.fr/infosci/archives/ldt0.html|Le Dantec]], Ostwald, si bien perfilándose bajo esta constelación filosófica, como un pensador de personalísimas aristas. Apoya o refuta a los nombrados, tanto como a filósofos clásicos+
 o a los más recientes Bergson y James. o a los más recientes Bergson y James.
  
  
-La exaltación que hace por igual del positivismo y el materialismo, no disimula su inclinación hacia el último. Así, por ejemplo:+La exaltación que hace por igual del [[figari:anexos:claps_-_spencer_y_comte_en_clinamen_03.pdf|positivismo]] y el materialismo, no disimula su inclinación hacia el último. Así, por ejemplo:
  
  
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-Dedica el libro "A la Realidad", no admitiendo otra realidad que la de la Naturaleza. La Naturaleza, a su vez, se resume en Substancia-Energía, concepto en el que la substancia no significa otra cosa que materia, con su clásica división en orgánica e inorgánica (o anórgana). De ahí la formal y definidora definición que hace en el prefacio: "Desde el punto en que me he +Dedica el libro "A la Realidad", no admitiendo otra realidad que la de la Naturaleza. La Naturaleza, a su vez, se resume en Substancia-Energía, concepto en el que la substancia no significa otra cosa que materia, con su clásica división en orgánica e inorgánica (o anórgana). De ahí la formal y definidora definición que hace en el prefacio: "Desde el punto en que me he colocado para encarrilar este intento investigarorio, considero al hombre como una de las infinitas modalidades de la substancia y de la energía integrales, esto es, como individualidad orgánica, como un valor 'morfológico', simplemente".((//lbidem//, Prefacio, p. XIV.))
-colocado para encarrilar este intento investigarorio, considero al hombre como una de las infinitas modalidades de la substancia y de la energía integrales, esto es, como individualidad orgánica, como un valor 'morfológico', simplemente".((//lbidem//, Prefacio, p. XIV.))+